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# 181
-viaje existencial-
"silla donde me siento tal vez
platos camisas y otras coartadas
la verdad pura es que no estoy
la gran verdad es que me fui."
Juan Gelman
"Cumplamos la tarea de vivir de tal modo que cuando muramos, incluso el de la funeraria lo sienta."
Mark Twain
TALLER POR COMPUTADORA | Larga en Septiembre |
POEMAS | Un aviador irlandés prevé su muerte | William Butler Yeats |
DEFINICIÓN
| Vida |
GRAFFITTI
PROSA | Hoy temprano | Pedro Mairal |
RESPUESTAS
| Excusas |
AGRADECIMIENTOS
ENLACES | Plásticos |
CONTACTO | niusleter@niusleter.com.ar |
Hola, ¿cómo estás?
¿Sabías
que en septiembre el año empieza de nuevo? ¿Que se acaba el
frío y el corazón se descongela?
Si tenés ganas de leer, escribir y compartir, podés darle vida a esas ideas
antes de que se pongan mustias del todo. No importa si vivís a deshoras o en la
loma del ojete.
Antes de que faldas y escotes, o los músculos de los ciclistas, o tus propias
hormonas te impidan concentrarte, antes de que las obligaciones y juergas de fin
de año te pasen por encima y te friten la cabeza y la vida social
renovada borre los buenos hábitos del aislamiento forzado por el frío,
aprovechá y anotate.
Taller por Computadora. Primavera anticipada.
Encuentros de leer y escribir en red.
Coordinan: Fernando Aíta y Alejandro Güerri
Más información al fondo
Un aviador irlandés prevé su muerte
Yo sé que encontraré mi destino
en algún lugar arriba entre las nubes;
a quienes combato no los odio,
a quienes defiendo no los amo;
mi país es Kiltartan Cross,
mis compatriotas, los pobres de Kiltartan.
Ningún
fin probable les causaría una pérdida,
ni los haría más felices que antes.
Ni la ley ni el deber deber me ordenaron luchar,
ni hombres públicos, ni multitudes entusiastas;
un solitario impulso de deleite
me arrastró a este tumulto entre las nubes;
todo lo sopesé y lo tuve en mente,
los años por venir parecían tiempo perdido
y tiempo perdido, los años pasados:
en equilibrio con esa vida, esta muerte.
VIDA, s. Especie de salmuera espiritual que
preserva al cuerpo de la descomposición. Vivimos en diario temor de perderla;
cuando se pierde, sin embargo, no se la echa de menos. La pregunta "¿Vale la
pena vivir?" ha sido muy debatida, en particular por los que opinan que no;
algunos de ellos escribieron extensos tratados en apoyo de esa idea y, gracias a
un minucioso cuidado de su salud, disfrutaron durante muchos años los honores de
una exitosa controversia.
En el Diccionario del Diablo, de Ambrose Bierce.
"Si las viejas chusmas de este barrio fueran mas putas este barrio sería una fiesta" En Fátima y Cachi, Parque Patricios. Visto por Dr Felipe.
"Quiero mascar chicle. Llamen un dentista." En Conde al 1300.
"Haga patria, mate un guardia urbana." En Alsina al 3600.
Hoy
temprano
Salimos temprano. Papá tiene un Peugeot 404 bordó, recién comprado. Yo me trepo a la luneta trasera y me acuesto ahí a lo largo. Voy cómodo. Me gusta quedarme contra el vidrio de atrás porque puedo dormir. Siempre estoy contento de ir a pasar el fin de semana a la quinta, porque en el departamento del centro, durante la semana, lo único que hago es patear una pelota de tenis en el patio del pozo de aire y luz que está sobre el garaje, un patio entre cuatro paredes medianeras altísimas y sucias por el hollín de los incineradores. Si miro para arriba, en ese patio parece que estuviera adentro de una chimenea; si grito, el grito apenas sube pero no llega hasta el cuadrado del cielo. El viaje a la quinta me saca de ese pozo.
En
la calle hay poco tránsito, quizá porque es sábado o porque todavía no hay
tantos autos en Buenos Aires. Llevo un autito Matchbox adentro de un frasco para
capturar insectos y unos crayones que ordeno por tamaño y que no me tengo
que olvidar al sol porque se derriten. A nadie le parece peligroso que yo vaya
acostado en la luneta. Me gusta el rincón protector que se hace con el vidrio
de atrás, al lado de la calcomanía de la Proveeduría Deportiva. En el camino
miro el frente de los autos porque parecen caras: los faros son ojos, los
paragolpes son bigotes, y las parrillas son los dientes y la boca. Algunos autos
tienen cara de buenos; otros, cara de malos. Mis hermanos prefieren que yo vaya
en la luneta porque así tienen más lugar para ellos. Yo no viajo en el asiento
hasta más adelante, cuando hace demasiado calor o cuando ya no quepo en la
luneta porque crecí un poco. Tomamos una avenida larga. No sé si es porque hay
muchos semáforos pero vamos despacio; además, después ya el Peugeot está
medio roto, tiene el caño de escape libre y hay que gritar para hablar;
una de las puertas de atrás está falseada y mamá la ató con el hilo del
barrilete de Miguel.
El viaje es larguísimo. Sobre todo cuando no están sincronizados los semáforos. Nos peleamos por la ventana, ninguno de los tres quiere sentarse en el medio. En la General Paz nos turnamos para sacar la cabeza por la ventana con las antiparras de agua de Vicky, para que no nos lloren los ojos por el viento. Papá y mamá no dicen nada. Salvo cuando pasamos por la policía, ahí hay que sentarse derechos y estar callados. Cuando ya tenemos el Renault 12, a Miguel se le vuela por la ventana medio pilón de figuritas de Titanes en el Ring y papá frena en la banquina para juntarlas porque Miguel grita como un enloquecido. Yo veo de repente que se nos acercan dos soldados apuntándonos con la metralleta, diciendo que estamos en zona militar. Le hacen preguntas a papá, lo palpan de armas, le revisan los documentos y después tenemos que seguir viaje sin juntar las figuritas que quedan ahí desparramadas, incluso la autografiada por Martín Karadagián.
Papá busca música clásica en la radio, a veces consigue sintonizar bien la emisora del Sodre. Nosotros estamos a las patadas en el asiento de atrás cuando de repente papá sube el volumen y dice "escuchen esto, escuchen esto" y hay que hacer una pausa silenciosa en medio de una toma de judo para escuchar una parte de un aria o de un adagio. Después, cuando llegan los pasacasetes para autos, el viaje a la quinta se hace bajo el dominio absoluto de Mozart. Miramos pasar hacia atrás el camino prolijo, los árboles podados con los troncos pintados de blanco, y escuchamos los quintetos para cuerdas, las sinfonías, los conciertos para piano, las óperas. Vicky lidera rebeliones para tapar a las sopranos de Las bodas de Fígaro o de Don Giovanni con nuestro cántico filial favorito que dice "Queremos comer, queremos comer, sangre coagulada revuelta en ensalada...". Pero después Vicky empieza a traer libros para el viaje y los lee sin prestarle atención a nadie, en silencio, cada vez más enojada, porque la obligan a venir, hasta que le dan permiso para quedarse los fines de semana en el centro para ir al cine con sus amigas, que ya salen con chicos, y entonces Miguel y yo tenemos cada uno su ventana indiscutible, aunque invitemos a un amigo.
Sentimos que no vamos a llegar nunca. Hay largas esperas a medio camino mientras mamá compra muebles de jardín o plantas, aprovechando que papá se quedó trabajando en casa. Con Miguel jugamos en el asiento de atrás a ver quién aguanta más sin respirar; cada uno le tapa el tubo del snorkel al otro para que no haga trampa, o, si no, improvisamos un partido de paleta con un bollo de papel y las dos patas de rana. Esperamos tanto que Tania se pone a ladrar, porque no aguanta más, encerrada en la parte de atrás de la rural Falcon que tenemos después del Renault. Entonces aparece mamá, con plantas o macetas o algún mueble que hay que atar al techo, y seguimos viaje.
[...] Para seguir viaje, vaya por acá
Pedro Mairal nació en Buenos Aires en 1970. Publicó las novelas Una noche con Sabrina Love (1998; Premio Clarín; llevada al cine en 2000), y El año del desierto (2005), el libro de cuentos Hoy temprano (2001), y dos de poemas Tigre como los pájaros y Consumidor final. Tiene al menos dos blogs.
Usted llega a cualquier hora de cualquier manera.
Su pareja lo recibe con esta frase: "Explicame ya qué pasó".
Invente una excusa verosímil pero original (en 100 palabras).
Mi muy querida: lo reconozco, he llegado tarde. Eso es eso y una excusa a mi comportamiento reciente sería un procedimiento de mameros y cobardes.
Pretexto o no, de todos modos, mi poca gallardía tiene asidero. Verás: un chucho bárbaro me recorre la espina cada vez que oigo tu reclamo; un miedo atroz que congela el derpa cuando entro imperceptible, ¡todavía hoy!, como un pata ‘e lana.
Algo que me confirma, rotundo, que siempre me equivoco de fracaso.
Querida, mi muy: acostumbrate ya a no susurrar en la noche, ni a reclamar más nada. Hace 17 años que estás muerta.
Julián López
"lo de siempre, tú sabes cómo me comporto yo. Tengo una revista virtual y me mentengo rediseñando y
metiéndole más información. Tú sabías de esto hace rato, no? es como tener una novia, pero sin miedo a una enfermedad desconocida, salvo la locura. Esta vez, me demoré tratando de decifrar un texto en esperanto que me llegó de Medellín, muy raro, no? Las cosas que escribe la gente."
Elian Luka
¿No viste el tiempo que hizo anoche? Estaba en la parada y se levantó un viento terrible, tuve que entrar a un bar a protegerme, entonces –mientras tomaba algo para calentarme, entra el Lalo que me dice que está muy mal y que lo acompañe a la casa. En la casa la madre me cuenta que los robaron el día anterior, se pone a llorar en mi hombro. Yo no sé que hacer, pero el Lalo dice si no me puedo quedar un rato a hacerles compañía y apaga la luz. Nos quedamos los tres dormidos, cuando me desperté ya eran las siete y salí rajando para acá. ¿Qué loco no…?
Nilipe
Llegue tarde porque:
"Fui a cenar chucrut a lo de unos amigos, pero me quede con hambre y aprovechando la luna llena me transforme en licantro y devore en forma entera un geriatrico.
Para mi sorpresa los ancianos tienen gusto a galletitas Express, pero sin patè"
Besos
JeRe
Yani Gelpi, Daniel Liñares, feliz año nuevo
Bienvenido a la Argentina, Tommy Impoco
Den,
abrazos
Gise Gelpi, Mechi, Alba, Luz, muchas gracias por la visita
mei
Juan Carlos Diez y Silvana Boemo
Mariana Pereiro
Lady
Mik
Sole Fernández Mouján
Ana Fernández
Fede Güerri
Valeria Lima
Carla Leyva
Fede Merea
Sol Francese
Alfredo Lemon
Pepa Rojas
Hernán La Greca
Julieta Otero
Javier Adúriz
Mancu, Campa, Chevy
Nikiorio
Mariana
Huesca
Dan y Paula
Laura Sacarelo
Gastón Tessoni
Héctor Zabala
Osvaldo Risso
Juan F. García
Denice
De Carlo
Sofía Lacolla
Laura y Patricio
María Julieta Salusso
Cristina Villanueva
Verónica Romano
Rosa Eugenia
Emilia Osipoff
Al recuerdo feliz de Mona Segade y Joaquín
Fernández.
A todas las personas que mandan buenas ondas.
Al sol, y a la primavera que se acerca.
~ Verónica Romano
Esculturas, relieves y más.
~ Santiago Iturralde
Pinturas y más, actualizado.
http://www.santiagoiturralde.com.ar/
Mándele Ñusléter a sus conocidos, que es gratis, hace bien y prolonga la sonrisa.
Si desea recibir Ñusleter,
envíenos un mensaje con asunto "Yo También Quiero" a niusleter@niusleter.com.ar
Si no más Ñusleter,
escriba "Ya Estoy Harto" a niusleter@niusleter.com.ar
Este taller es un recorrido interactivo, imaginativo, personal y colectivo, por un conjunto de lecturas y ejercicios-juegos-experimentos de escritura. No es un taller de corrección ni de terapia para gente que encima escribe. La idea es producir una serie de textos a partir de diversos disparadores, desarrollarlos, compartirlos, dar y recibir opiniones, editarlos.
~
Duración: 5
semanas (martes y
viernes)
Inicio:
martes 11 de septiembre.
Cierre:
martes 16
de octubre.
~ Objetivos:
#
Desarrollar un texto o serie de textos, por partes.
# Proponer un ida y vuelta entre
lectura y escritura.
# Compartir textos e ideas.
# Conocer nuevos
autores y/o disfrutar de otros.
~ Requisitos:
# Tener ánimo de disfrutar.
# Tirar la mejor, buenas vibraciones para el grupo. Las críticas
desde ya (con buena leche) son bienvenidas.
# Sin solemnidad ni acartonamiento, tomárselo en serio.
~
Dinámica de trabajo:
# Cada semana
enviamos un correo con: Lecturas con
un breve Recorrido,
y Consignas.
Además Figuritas
y extras en
relación a los temas tratados.
#
En un blog
(creado para el taller) se comparten y comentan las lecturas y los textos de
cada participante.
# Paralelamente, cada
semana enviamos nuestras Devoluciones
y mandamos un correo con nuevas lecturas,
recorridos y consignas.
# Y así.
~ Coordinan:
Fernando Aíta
Alejandro Güerri
~
Cupos limitados
~ Costo: $ 100 (cien pesos argentinos)
~ Cierre de inscripción: viernes 7 de septiembre.
~ Para anotarte, escribí un mensaje con asunto Yo me anoto a niusleter@niusleter.com.ar y te mandamos un acuerdo de participación y detalles sobre las formas de pago.
Más información en http://niusleter.com.ar/taller/tallerliterario.html
¿Por qué hacerlo? DIEZ (10) MOTIVOS.
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